LinkedIn como activo digital: cómo transformar tu perfil en una Landing page que genera resultados.

LinkedIn ya no es solo un CV online.

Tampoco es una red para “estar por las dudas”.

Hoy, tu perfil puede convertirse en una herramienta de posicionamiento, conexión y conversión.

Pero para eso, hay que diseñarlo como lo que realmente es: un activo digital estratégico.

En este post, te comparto una guía clara y concreta para optimizar tu perfil de LinkedIn y convertirlo en una landing page que trabaja para vos.

1. Foto de perfil

• Mostrate con autenticidad

• Primer plano: tu cara debe ocupar el 80% del encuadre

• Fondo neutro y profesional

• Tamaño ideal: 400 x 400 px

• Usá tus colores de marca si aplica

¿Por qué importa?

La foto es lo primero que genera conexión o distancia. Si no transmite confianza, perdés la oportunidad en el primer scroll.

2. Banner de perfil

• Mostrá lo que hacés y para quién

• Incluí una frase clara y concreta

• Sumá un llamado a la acción

• Evitá saturarlo de texto o imágenes

• Tamaño sugerido: 1584 x 396 px

¿Tip extra?

Podés subir una presentación tipo carrusel desde la edición del banner. Te permite mostrar distintos ángulos de tu propuesta.

3. Titular (Headline)

• No pongas tu cargo: contá qué hacés y qué ofrecés

• Usá frases cortas, con foco en valor

• Evitá títulos genéricos o demasiado amplios

Ejemplo real:

“Estrategias de marketing digital que convierten. Funnels, campañas, contenido.”

4. Acerca de (About)

• Contá tu historia en 3 bloques: quién sos, qué hacés, cómo ayudás

• Sumá resultados medibles si tenés

• Cierre con llamado a la acción (contacto, agenda, link)

• Usá lenguaje humano, no técnico

5. Enlace personalizado (botón)

• Activá el botón debajo de tu titular

• Redirigí a tu agenda, sitio, propuesta o portfolio

• Editalo desde el ícono del lápiz > “Botón personalizado”

• Activá la opción de visibilidad en búsquedas y mensajes

Este botón es una llamada directa a la acción. No lo dejes en blanco.

6. Servicios

• Mostrá qué ofrecés de forma concreta

• Incluí una imagen de 1200 x 628 px

• Pensalo como un catálogo resumido

• Segmentá si ofrecés más de un tipo de servicio

7. Destacado

• Subí tus mejores contenidos:

• Presentaciones

• PDFs

• Videos

• Testimonios

• Casos de éxito

• Usá esta sección para validar lo que decís con hechos

8. Experiencia

• Sumá solo roles relevantes a tu posicionamiento actual

• Mostrá resultados, logros y funciones clave

• Incluí enlaces cuando sea posible

• No es un listado de tareas, es una validación de autoridad

9. Proyectos

• Mostrá campañas, estrategias o trabajos específicos

• Usá estructura clara: desafío > solución > resultado

• Podés agrupar por tipo o industria

• Incluí links externos si están disponibles

10. Actividad

• Publicá con frecuencia

• Compartí contenido original: ideas, herramientas, reflexiones, casos

• Interactuá con otras personas para aumentar visibilidad

• LinkedIn prioriza perfiles activos. El silencio no convierte.

11. Habilidades

• Mostrá tus dos más relevantes arriba

• Cargá hasta 50

• Alinear habilidades con lo que ofrecés te da más chances en búsquedas

• Es una sección estratégica, no de relleno

12. Impresiones: la métrica olvidada

• Las impresiones muestran cuántas veces se ve tu contenido o perfil

• Si están bajas, no te están viendo

• Aumentarlas depende de tu actividad, tu perfil y la relevancia de tu contenido

• Medilas cada semana. Ajustá si caen

• Visibilidad no es opcional. Es el punto de partida para que algo pase

No es presencia, es estrategia

Optimizar tu perfil de LinkedIn no es maquillaje.

Es diseñar tu identidad digital para que trabaje por vos.

Una vez bien armado, tu perfil se convierte en una landing page que posiciona, genera leads y fortalece tu autoridad.